En la red se me conoce por el nombre de Siassh salvo en uno o dos lugares, si bien toda aquella gente con la que compartí tiempo y letras en sus días siempre relacionará dicho nick con mi persona pese a los otros que haya podido usar.
Aquí no encontraréis fantasía, pero tampoco realidad. Ni verdades ni mentiras, ni siquiera verdades a medias. Encontraréis, simplemente, un pedazo de mí. ¿Verdadero o falso? ¿Qué importa? La cuestión es disfrutar.
Cavilar sobre lo que sea, cuando sea, cuando quiera. Un rincón en el que escribir sobre lo que se me ocurra, como prefiera. Algunas veces mis palabras serán como las de cualquier otro transeúnte. Quizás en otro momento prefiera mostrarme (que no ser) más culta y optar por un lenguaje más literario, más hermoso.
¿Por qué éste nombre? Si bien mi color favorito será siempre el negro, el violeta ocupa el segundo lugar con creces. ¿Qué mineral mejor que la amatista para simbolizarlo? ¿Por qué no dejar que cada entrada de éste blog sea una de las múltiples habitaciones de un palacio, donde encontrar un poco más de mi persona, mi mente y mis cavilaciones? De ahí el nombre. Bienvenidos al Palacio de Amatista.
Sólo espero que aquí encontréis un lugar en el que pasar el rato. Y que os guste perder conmigo algunos minutos de vuestro tiempo.
